EL PUEBLO QUE ME VIO NACER

 

San Cebrián de Castro fue el afortunado en el yo nací, jugué por sus calles sin asfaltar, estudien en su escuela y crecí, mis padres en el murieron y en el están descansado su vida eterna, aunque mi padre no nació en el aquí se caso y termino su vida, como buen gallego que fue a Zamora vino a segar en San Cebrián conoció a mi madre con la que se caso y raíces en el hecho, aunque tubo que emigrar para darnos de comer a los dos hijos que vivíamos de cinco que el matrimonio tubo, pero fue tanto el cariño que ha estas tierras tubo que sus últimos días en ella vivió.

Que tendrá San Cebrián que como ha el ha tanta gente enamora, gallegos, asturianos, madrileños, bilbaínos, andaluces etc.… que a el acuden cuando pueden unos por placer otros por obligación pero cuando están en el se sienten complacidos y lo pasan bien.

Mis amigos lo han visitado y se han ido muy emocionados, grandes versos le han escrito que en la revista se han publicado.

Que tendrá San Cebrián que todo el mundo queda del prendado, serán sus gentes que como si del lugar fueran los han tratado, o será el mismo que los ha enamorado, será el su castillo de Castrotorafe, será su historia o será su paz, lo que si se que quien lo ha visitado repetir quiere por que de el se va prendado.

No cambies pueblo mío orgulloso estoy de ti, así quiero seguir para mi eres único, muchos pueblos hay en castilla muchos conozco pero como tu ninguno, tus veranos son únicos para los del lugar y forasteros por eso pueblo mío no cambies.

Doy gracias a los que te promocionan de palabra, por escrito o por Internet, en España eres famoso, gracias a tus fotos, tus versos y tus powerpoing con fotos y relatos del lugar.

San Cebrián mucha gente te quiere y mucha es la que te admira pero también hay mucha que te envidia, no se que tendrás que sensaciones ocultas pero si es cierto que el que te visita de ti no se olvida nunca.

 

 

JUANITO

 MI PUEBLO

 

San Cebrian, tu que me viste nacer, Por tus calles correr, jugar, brincar, saltar, con el aro, la bicicleta, la peonza, el patín o las canicas, en tu escuela estudiar y aprender lo poco se, tu me tuviste esos años de juventud hasta que de ti tuve que emigrar, para en otras tierras ponerme a trabajar, en ti me bautice, comulgue y me confirme en las otras tierras me case, y una familia maravillosa forme, a ti vengo cada vez que puedo a disfrutar de tu tranquilidad y por tus calles pasear y aquellos tiempos recordar, ya pasaron 56 años y parece que fue ayer, pero el recuerdo esta vivo en mi y por eso recuerdo cada lugar, y para que no creas que te olvido por ti escribo para recordarte que aun estoy vivo. No tengo fortuna pero te tengo a ti que eres mi mayor riqueza. Al leer muchos recordaran lo que fue su niñez en tus calles, campos y eras porque con sudor y trabajo salieron de su niñez para hacerse mayores.

 

San Cebrian, sigue acogiéndome en tus calles y campos que yo seguiré viniendo para seguir disfrutando y recordando aquellos maravillosos años de juventud yo boy envejeciendo y tu en cambio vas rejuveneciendo con tus calles arregladas y tus nuevos edificios y lugares de ocio poco te hacen para lo que tu te mereces.

 

San Cebrian, cuna de mis abuelos y mis padres, mí cuna también, méceme en tus brazos hasta que quieras que yo no te quiero perder.

 

San Cebrian, sigue siendo joven para que la juventud no te abandone, como no te abandonaron muchos mayores, que hoy volvemos a ti por que sin ti no podemos vivir. Nos hace falta respirar tu puro aire y tu tranquilidad.

 

JUANITO    

Poesía al vino Zamorano

 

OH, vino pontifical

Que en el vaso estas metido

Tú para la consumición

Eres la sangre de cristo

Dime mozo valiente

En que plato té has criado

Yo, en la cepa me crié

De la cepa me cortaron

Me metieron en un cesto

Me cargaron en un carro

Por una zarcera me arrojaron

A puntapiés y a patadas

Allí las tripas me sacaron

Me dejaron fermentar,

Y en la bodega en una

Barrica me dejaron reposar,

Calla, calla parlanchín

Juez de comisiones

Que tú te has de hallar en

Todas las conversaciones

Calla y no hables mal de mí

Que quien mal habla de mí

Por el suelo a de rodar

Salta el conejo brinca la liebre

Bebed Zamoranos

Que os pondréis alegres

 

JUANITO

LA MUERTE DE UN SER QUERIDO

 

Cuando se pierde a un ser querido nos planteamos muchas preguntas y vamos entendiendo los ciclos de la vida, inevitablemente aceptamos que las cosas ocurren independientemente de lo que nosotros deseábamos o esperábamos.

 

Pienso que lo natural es nacer y morir pero cuando a un ser querido le llega la hora, sea como fuere, parecemos no estar preparados, como si fuera algo que nunca pudiera ocurrir, como si estuviera ajeno a nuestra condición de humanos. Cierto día pasa y entonces pensamos en porque no disfrutamos de esa persona, porque no aprendimos de ella, porque…. Muchas preguntas pero la respuesta está muy clara: vive con plena conciencia cada segundo, disfruta cada paso de la vida, y acepta todo lo que ocurra con alegría y buen carácter. Hay otros mecanismos de respuesta, la culpabilidad, la depresión, el suicidio etc… pero son opciones alejadas del sentido común y que nos pueden llevar por caminos de sufrimiento que son innecesarios.

No deseo la muerte de nadie y menos de un ser querido, pero si deseo que hasta que esa hora llegue seamos capaces de vivir la vida, sin pensar tanto en lo que pasará y siendo más conscientes del presente, de lo que acontece en cada instante, por muy cotidiano que parezca. Para entender esto solo hay que quitarse “el traje de romano” y abrir un poco nuestro corazón, sin miedo y aceptar a los que nos rodean, disfrutando de ellos sin tantos prejuicios.

En realidad pienso que la muerte no existe, sino únicamente en un plano físico y ello me provoca una pérdida del miedo a vivir la vida, sin tapujos, aprovechando cada respiración hasta que por suerte, por que dios quiera o por que simplemente tenga que ser así, muera.

 
Por ello no hay que preocuparse. No me cabe duda que tras la muerte, para las grandes personas están reservados los grandes lugares. Ese gran lugar es un regalo y ese regalo es permanecer en los corazones de los que te han querido. Eso significa ser eterno y la eternidad es inmortal.

AUTOR DESCONOCIDO